El 2 de septiembre pasado el gobierno provincial decretó la emergencia económica para el sector comercial y de servicios de todo el territorio santafesino. La medida se fundamentó en el impacto de los eventos climáticos y la crisis hídrica de comienzo de año. Pero pasadas las tormentas y las inundaciones las ventas siguen cayendo. Según el informe del Centro Comercial de Santa Fe el 45,9% de los comercios consultados en Agosto tuvo caídas en ventas respecto al mismo mes de 2015. Se demora la alegría.